Cómo recalentar la salsa: pruebo 3 métodos

¿No sabes cómo recalentar la salsa sobrante?

Estás en el lugar correcto.

He probado tres formas diferentes de recalentar la salsa para descubrir cuál funciona mejor para brindar esa delicia rica y suave.

También me concentré en asegurarme de que la salsa no terminara grumosa o líquida.

Psst: mi método favorito estaba en la estufa.

¿Listo? Saltemos directamente.

Una nota sobre mi experimento.

Probé los siguientes métodos de recalentamiento de salsa:

  • En la estufa (mi forma favorita)
  • En el microondas (bueno para pequeñas cantidades)
  • En el horno (solo si ya estás usando el horno)

La estufa es ideal para recalentar salsas. Puede ajustar fácilmente el grosor de la salsa mientras la ve recalentarse.

Recalentar en el microondas es súper rápido, pero corre el riesgo de calentarse de manera desigual con cantidades más grandes.

El horno es un buen método si está usando el horno de todos modos, pero no vale la pena solo para la salsa.

Recalentar salsa en la estufa

Vierta la salsa en una sartén fría, rompiendo los trozos grandes si se ha gelificado. A fuego lento, caliente la salsa mientras la revuelve con una cuchara o un tenedor para lograr una consistencia suave. Agregue un poco de líquido extra si la salsa se ha separado y bata con un batidor hasta que se vuelva a combinar.

Cómo recalentar la salsa en la estufa:

  1. Vierta la salsa en una sartén fría.
  2. Si la salsa se ha solidificado en una consistencia gelatinosa, divídala en trozos más pequeños para ayudar a que se caliente más rápido.
  3. Vuelva a calentar a fuego lento, revolviendo con frecuencia para eliminar los grumos.
  4. Si la salsa se ha separado, use un batidor para combinarla vigorosamente nuevamente.

Agregue caldo extra o leche si la salsa es demasiado espesa y necesita diluirse.

Si la salsa parece demasiado líquida, puede agregar una mezcla de maicena para ayudar a espesarla (tendrá que hervir antes de que la maicena haga efecto).

Si tiene mucha salsa para recalentar, aumente el fuego a un nivel medio para acelerar el proceso.

Pero no te olvides de revolver, ya que la salsa puede quedar atrapada en el fondo de la sartén.

mi Conclusión

Este era mi método favorito.

Es bastante rápido y fácil saber cuándo la salsa está lo suficientemente caliente. Tampoco importa la cantidad de salsa que tenga, siempre que quepa en una sartén, ¡está listo para comenzar!

Recalentar salsa en el microondas

Vierta la salsa en un recipiente apto para microondas y cúbralo con una tapa o una envoltura de plástico (con algunos agujeros para que escape el vapor). Caliente la salsa durante 30 segundos y luego revuelva. Repita a intervalos de 30 segundos, revolviendo cada vez hasta que la salsa esté caliente. Tenga cuidado de no sobrecalentarlo.

Cómo recalentar la salsa en el microondas:

  1. Vierta la salsa en un recipiente apto para microondas y cúbralo con una tapa para salpicaduras. Si no tiene una tapa, puede usar una envoltura de plástico.
  2. Caliente durante 30 segundos y luego revuelva.
  3. Repita en intervalos de 30 segundos, revolviendo cada vez.
  4. Si la salsa parece espesa, agregue una cucharada de caldo para diluirla.

Revolver la salsa asegura que se caliente uniformemente. Si olvida revolver, puede terminar con puntos fríos.

Solo use ráfagas cortas de calor para asegurarse de no sobrecalentar la salsa.

mi Conclusión

Este fue el método más rápido y fácil, pero una vez que superas el valor de un tazón de salsa, es demasiado para el microondas.

Recalentar salsa en el horno

Precaliente el horno a 350°F (177°C). Vierta la salsa en un plato apto para horno. Rompa los grumos grandes y extienda la salsa uniformemente. Cubra bien la sartén con papel aluminio y caliente durante 5 a 10 minutos, revisándola y revolviendo la salsa de vez en cuando.

Cómo recalentar la salsa en el horno:

  1. Precaliente su horno a 350°F (180°C).
  2. Vierta la salsa en un plato adecuado extendiéndola uniformemente.
  3. Cubra bien la salsa con papel de aluminio.
  4. Caliente durante 5-10 minutos, revolviendo a la mitad.

El papel aluminio atrapará el vapor, asegurándose de que la salsa no se seque.

Elige tu plato sabiamente. Si la salsa se esparce demasiado alrededor de la fuente para hornear, se calentará muy rápidamente, así que tenga esto en cuenta.

mi Conclusión

La única razón que puedo ver para elegir esta opción es si ya está usando el horno para otra cosa.

En caso contrario, el microondas o la estufa y mejores opciones.

Cómo almacenar salsa

Puede guardar la salsa de manera segura en el refrigerador hasta por 2 días, siempre que esté en un recipiente hermético. Para prolongar la vida de su salsa, puede sacarla del refrigerador y llevarla a ebullición antes de enfriarla y guardarla nuevamente. La salsa durará 2 días más.

Técnicamente, puedes hacer el truco de volver a hervir indefinidamente, pero no lo recomiendo.

Su salsa no necesita enfriarse a temperatura ambiente antes de guardarla, pero debe tratar de enfriarla tanto como sea posible antes de ponerla en el refrigerador.

Para acelerar el proceso de enfriamiento, distribuya grandes cantidades de salsa en porciones más pequeñas. O ponga la salsa en un recipiente y luego rodéela con agua fría.

No deje la salsa a temperatura ambiente durante más de dos horas.

Nota: su salsa puede convertirse en gelatina en el refrigerador, pero no se preocupe. Se diluirá rápidamente a medida que lo recalientes.

¿Puedes congelar la salsa?

Las salsas que no contienen productos lácteos se congelan bien hasta por 4 meses. Si su salsa contiene una cantidad significativa de leche o crema, corre el riesgo de partirse al descongelarse. Sin embargo, es posible que pueda volver a unirlo con un poco de agitación vigorosa.

Las salsas espesadas con almidón de maíz también pueden diluirse una vez descongeladas. Pero puedes volver a espesarlos con más maicena sin ningún efecto negativo.

Cómo congelar la salsa: